De Denia a Alicante

Continuamos sin prisas nuestro viaje hacia el sur, después de haber descansado tres días en Denia . Hemos aprovechado para cargar las baterías y los depósitos de agua del Daruma y para visitar la ciudad de Denia.

Una constante en todos los lugares que visitamos son las distancias que debemos caminar para hacer cualquier visita o para ir de compras. Por ejemplo, desde el Puerto de Denia hasta el centro, son 3 kilómetros de ir y 3 de volver. Desde el Puerto de Altea hasta la Iglesia del casco antiguo, 1,8 kilómetros. Desde el Puerto de Alicante hasta la Plaza de los Luceros, hay 2,6 kilómetros. Para que los niños caminen sin quejarse demasiado, Aida tiene que inventarse cuentos e historias que duren todo el camino. Viva la imaginación !

Desde Denia, hemos pasado el Cabo de San Antonio para ir a amarrarnos a una de las boyas que hay en la Punta de la Galera, junto al puerto de Jávea.

La noche que hemos pasado en esta boya , ha sido una de las peores. Cuando ya estaba oscuro, ha entrado un mar de fondo del sur que no preveíamos hasta el día siguiente, con olas de más de un metro, que impactaban directamente contra nosotros. El movimiento y el ruido que hacía el barco, ha hecho que prácticamente no hayamos podido dormido nada.

Con las ganas que teníamos de salir de este lugar, nos hemos levantado justo después de salir el sol y hemos ido al otro extremo de la ensenada de Jávea, en la Cala Sardinera, que está protegida del viento y el mar del sur.

El lugar es muy bonito y el agua transparente. La lástima es que con la cantidad de medusas que había, no nos hemos podido bañar.

Al día siguiente, nos hemos ido pronto hacia Altea, a unas veinte millas, para evitar el viento del sur que estaba previsto que llegara a fuerza 5 hacia el mediodía y que nos venía justo por la proa. Con el mar en calma y un viento flojo que nos entraba por la proa, hemos pasado el Cabo La Nao , que tantas veces he oído por la radio del velero, debido a que en este cabo se encuentra una de las emisoras que emiten las previsiones meteorológicas .

A las once y media ya estábamos en el Rincón del Albir, cerca de Altea, para amarrarnos a una de las boyas que hay en este punto .

La sorpresa ha sido cuando hemos visto que en las boyas decía que la eslora máxima era de 8 metros . Aun así, nos hemos enganchado y hemos llamado el Puerto de Altea para ver si tenían lugar para nosotros. Lo único que nos han dejado es amarrar en el muelle de la gasolinera, entre las seis de la tarde y las diez de la mañana. Pero hemos aprovechado la ocasión para visitar Altea, que vale realmente la pena.

Al día siguiente, con previsión de viento del SO de hasta fuerza 5 y de lluvia, que tenia que empezar al mediodía, hemos dejado Altea antes de las 9 de la mañana para ir hacia Alicante, a unas 30 millas de distancia .

Primero hemos pasado entre la Punta del Albir y la piscifactoría que hay delante de Altea, para virar luego a estribor y enfilar rumbo SO casi hasta Alicante. Durante la travesía hemos pasado por delante de Benidorm. Más que un lugar de la costa Alicantina , parecía que estuviéramos navegando frente a Manhattan . Al poco, ha empezado una fina lluvia que ya no nos ha dejado hasta llegar a Alicante.

En principio, queríamos quedarnos sólo dos días en este puerto . Pero han anunciado fuertes lluvias y tormentas para el lunes y martes . Es probable que tengamos que alargar nuestra estancia antes de continuar hacia el sur. Ya os iremos informando .